Hace una semana, publicamos un artículo sobre si es obligatorio o no suscribir un seguro de hogar para mi vivienda. Hoy queremos describir uno de los elementos fundamentales de esa póliza como es lo que se conoce por “contenido”. Vamos a ver qué elementos lo componen, y cómo valorarlo.
Las mejoras en el seguro de hogar
Los seguros de hogar, en un principio, se conocían únicamente como pólizas de incendio, porque solamente cubrían ese riesgo. De hecho en muchas viviendas, encima de la puerta de acceso, podemos ver “asegurada de incendios”.
Más adelante, se han ido introduciendo garantías, convirtiendo este seguro en lo que hoy conocemos como «multirriesgo”, ya que tiene muchísimas más coberturas que antes.
Las partes del seguro de hogar
Los elementos fundamentales de un seguro de hogar, hoy en día, son:
- Continente
- Contenido
- Responsabilidad civil
Son las tres patas esenciales de una póliza, para que la pudiéramos considerar completa. Hoy nos vamos a centrar en el segundo elemento ya que, en muchas ocasiones, es la que más dificultades ocasiona entre nuestros clientes.
¿Qué elementos son contenido?
Para que sea fácil entenderlo para cualquier persona, siempre decimos que debe considerarse contenido, todo aquello que, si nos mudáramos a otra casa, nos podríamos llevar con nosotros. Hablamos de:
- Ropa
- Muebles
- Electrodomésticos
- Ordenador, teléfonos
- Joyas y objetos de valor
- Alimentos del frigorífico y congelador
- …
Una vez identificados estos bienes, queda la segunda parte de la cuestión: ¿cómo valoramos estos bienes?
Creemos que, en este caso, lo mejor es realizar una especia de inventario, y darle un valor aproximado a cada uno de los elementos que tenemos, especialmente aquellos de un coste elevado.
Si necesitas que te ayudemos a mejorar tú seguros de hogar, o a darle un valor correcto a tu contenido, ponte en contacto con nosotros. Contacta con nosotros y ponte en buenas manos.