Tal y como empezamos el pasado 24 de diciembre, seguimos con la segunda entrega de “Siniestros – Casos Reales”. En esta serie de entradas, tratamos de poner en valor la labor de una Correduría de Seguros profesional, que se esfuerza en la defensa de sus asegurados en todo momento: en la contratación de la póliza pero, sobre todo, ante un siniestro.
Si la primera parte trató de casos reales de siniestros y seguros de coche, hoy hablaremos de los seguros de comunidad, cuyos siniestros suelen ser bastante complicados.
La dificultad en los seguros de comunidad
En siniestros de comunidad, nos solemos encontrar con varios inconvenientes. Principalmente, porque pueden involucrar a muchas personas afectadas, lo que conlleva una labor de coordinación costosa o, también, por la dificultad en la localización del origen de la avería, que en última instancia determinará a quién le corresponde reparar ese origen y hacer frente al coste de los daños incurridos, si al piso particular o a la comunidad.
Veamos ejemplos típicos de siniestros, y la solución dada por nuestra Correduría
El problema de la difícil localización del origen del siniestro
En un local de la planta baja aparecen unas filtraciones. El inquilino se queja a nuestra Comunidad, y cuando van los gremios a localizar el origen, entienden que se corresponde no con nuestra comunidad, si no con la colindante.
El perito que fue posteriormente dijo lo mismo. Esto supone un gran problema porque se puede alargar el siniestro mucho tiempo, estando el inquilino del local afectado molesto con la resolución del problema por la comunidad.
Finalmente, insistimos en que volviese a localizar otro gremio, y se detectó el origen en nuestra Comunidad, lo que permitió la rápida reparación de daños en el local, y se evitó la reclamación por vía judicial que ya estaba iniciando la compañía de seguros del local contra nuestra Comunidad.
Filtraciones en trasteros y las soluciones rápidas
Esto es un clásico: filtraciones desde la Comunidad o un local en planta baja a varios trasteros de la misma comunidad.
En este caso el origen estaba en el local, y el perito de la comunidad, como es lógico, dijo que la póliza del local debía atender el origen y los daños causados. Resulta que el seguro estaba anulado.
Intervenimos para hablar con la compañía contraria y que rehabilitaran el seguro del local, lo cual no fue nada fácil. Mientras, también presionamos a nuestra compañía para que pagara a los asegurados el coste de la reparación y luego reclamara a la contraria.
De esta forma se solucionó un tema, que sin nuestra intervención se hubiera demorado muchos meses e incluso años, estando los dueños de los trasteros todo ese tiempo con desperfectos. Al mismo tiempo, se asesoró a los distintos vecinos que dieran parte a su seguro de hogar para ser indemnizados plenamente por los daños en sus pertenencias, y muchos lo consiguieron.
Como decíamos al principio, los siniestros en comunidades de propietarios, pueden llegar a ser complicados. Si queréis que revisemos vuestra póliza, que la gestionemos y ser atendidos por profesionales en todo momento, os ayudaremos tanto en la contratación como en el siniestro. Contacta con nosotros y encontrad el seguro de comunidad que mejor proteja la convivencia entre los vecinos.